Las Personas Defensoras
El sentido de nuestro trabajo
En 2013 llegaron las primeras personas defensoras a la Casa de Respiro. Desde entonces más de 25 personas defensoras han pasado por el proyecto (algunas con sus hijos o familias). Todos los años (salvo el año pandémico) solemos recibir entre 2 y 5 personas para realizar el programa.
¿A qué se dedican?
Su defensa de los DDHH
Las labores a las que se dedican estas personas son muy diversas, así como los lugares de los que vienen. Algunas de las temáticas en las que estas personas desarrollan su labor son:
«Diferentes contextos, diferentes procesos»
Realidades Diversas
En el mapa se puede ver que han llegado personas ubicadas en muy diferentes lugares del mundo, algunos muy cercanos (como España o Marruecos) y otros muy alejados (como Pakistán o Suazilandia). Como se puede apreciar el autocuidado es algo necesario en todos los lugares del planeta, ya que las personas defensoras reciben enormes impactos por su labor.
Así encontramos que los contextos y las realidades en las que se encuentran las personas defensoras son múltiples y multiculturales, y las respuestas de los cuerpos también son muy diferentes. Y el impacto de la defensa de los DDHH en los cuerpos (físicos, sociales, culturales…) y en la salud integral es muy diferente según de donde se venga, la cultura, la familia, el entorno… pero es común la necesidad de cuidado personal y colectivo.
Por ello los procesos son completamente individuales y no siguen una rutina preestablecida. Cada persona llega con una serie de necesidades específicas, que dependen mucho del momento vital.
Cuando una persona llega a la Casa de Respiro viene respaldada por una organización donde suele desarrollar su labor. Los colectivos activistas a los que pertenecen son un soporte fundamental para las personas defensoras. Aunque el trabajo que realizamos es individual, somos muy conscientes de que la labor se desarrolla en un entorno social concreto, y con un colectivo determinado. Es para nosotras fundamental que el cuidado tenga una repercusión en lo colectivo.
Entre algunos de los colectivos de las personas que han llegado a la casa, a los que estamos muy agradecidos de su confianza en nuestro trabajo, podríamos encontrar a la IMD, Caminando Fronteras, la Red Nacional de Mujeres defensoras de Honduras…
Próximamente podrás encontrar una sección en nuestra web en la que iremos pidiendo a muchas de estas personas y organizaciones diferentes colaboraciones, que nos cuenten como son sus proyectos, sus ideas, su paso por la casa… así podrás conocerlas un poco más en profundidad, y podrás comprender por qué para nosotras ha sido una gran suerte tenerlas en nuestra Casa. Es para nosotras una suerte tenerlas en nuestro mundo. Porque nos hace mucho mejores.